Inflamación de bajo grado: el enemigo silencioso detrás de tu fatiga, hinchazón y malestar
¿Te sientes constantemente cansada, hinchada o con síntomas “extraños” que nadie logra explicar? Tu digestión está alterada. Tu energía no levanta cabeza. Tus análisis “están bien”. Y, sin embargo, tú sabes que algo no va bien. Tal vez lo que está pasando es algo que no siempre se mide en una analítica estándar, pero que afecta profundamente a tu bienestar: La inflamación crónica de bajo grado.
INFLAMACIÓN CRÓNICA
Dra. Ivanna González
9/9/2025
¿Qué es la inflamación de bajo grado?
Es una respuesta inflamatoria leve, constante y persistente que tu cuerpo mantiene activa durante semanas, meses o incluso años, como si tuviera una alarma interna que nunca termina de apagarse.
A diferencia de una inflamación aguda (como cuando te das un golpe o tienes fiebre), ésta es silenciosa, pero constante.
Y lo más importante: afecta a todo tu organismo.
¿Qué síntomas puede provocar?
Esta inflamación no siempre duele, pero se siente:
Hinchazón abdominal persistente
Gases, digestiones lentas o pesadas
Fatiga constante
Dificultad para perder peso
Dolores articulares o musculares leves
Niebla mental, irritabilidad
Alteraciones en la piel o caída de pelo
Empeoramiento de síntomas hormonales o autoinmunes
Y sensación general de estar “inflamada por dentro”
¿Cuál la causa?
Las causas más comunes en mujeres con perfil digestivo y autoinmune son:
Disbiosis intestinal (flora alterada)
Permeabilidad intestinal
Estrés crónico y sistema nervioso desregulado
Dietas desequilibradas o exceso de restricciones
Falta de descanso reparador
Exposición continua a tóxicos ambientales
Enfermedades autoinmunes como el hipotiroidismo de Hashimoto
Todo esto alimenta un círculo vicioso donde el cuerpo no logra resetearse y "apagar la alarma".
¿Cómo se trata la inflamación de bajo grado?
No se trata de suprimir síntomas.
Se trata de calmar el sistema desde dentro.
Un enfoque integrativo debe incluir:
Reparación del intestino y la mucosa digestiva
Regulación del sistema inmune (sin apagarlo, sino equilibrándolo)
Estrategias para reducir el estrés sostenido
Mejorar la calidad del sueño
Identificar y reducir cargas inflamatorias ocultas
Y sobre todo, diseñar un plan realista, sin perfeccionismo, que te devuelva el equilibrio.
¿Qué puedes hacer tú desde ya?
Escuchar a tu cuerpo sin culparte
Salir del modo “arreglo rápido” y empezar a ver el conjunto
Pedir una valoración más completa si tus síntomas no cuadran con lo que muestran tus pruebas
No resignarte a vivir “medio bien” por normalizar el malestar
En resumen:
✅ La inflamación de bajo grado no se ve fácilmente, pero afecta profundamente
✅ Puede ser la raíz de tus síntomas digestivos, hormonales o de fatiga
✅ Y sí: se puede trabajar y mejorar, con el enfoque adecuado
¿Sospechas que esto es lo que te está pasando?
Si llevas tiempo con síntomas que nadie te ha sabido explicar bien, puedo ayudarte a ver si hay una inflamación silenciosa detrás, y a diseñar un plan que te devuelva equilibrio y energía.
Puedes agendar tu consulta integrativa aquí:
Tu cuerpo no está exagerando.
Está pidiendo que lo entiendas mejor. Y esa es una muy buena señal de que estás lista para empezar.